Hoy vamos a hablar de uno de los oscuros objetos de deseo por parte de los endureros de todo el mundo, el nuevo Bell Super 2R. Aquí vamos a hablaros de los aspectos positivos y negativos que nos trae este casco, y por supuesto donde se posiciona con respecto al resto de modelos que ya conocíamos.
¿Que nos aporta el Bell Super 2R?
En este caso nos encontramos ante un casco con mentón desmontable, es decir la parte delantera que diferencia un casco normal de MTB de uno integral, en este caso es desmontable, de tal manera que tendremos lo mejor de dos mundos en la palma dela mano cabeza… un casco abierto, cuál casco de XC para las subidas o tramos de enlace, y un casco integral para las bajadas más peligrosas. Todo esto con un peso muy contenido y la comodidad que conlleva el que solo necesitemos un casco para nuestras rutas.
No es el primer casco de estas características que hemos visto en el mercado, pero quizás si el que se ha desarrollado de principio a fin con esta idea. Podremos decir que se trata de un casco con unos buenos acabados, que no excelentes, y que dispone de una amplia gama de colores a elegir (7 en la versión normal y 3 en la versión MIPS) y en tres tallas diferentes: S, M y L. Además, incluye un soporte para instalar cámaras GoPro compatibles en la parte superior.
Como apunte os recomendamos probar el casco antes, ya que a algunos de nosotros que utilizábamos la talla M en el primer Super, este Bell Super 2R nos ha venido algo justo, tanto que hemos tenido que optar por una talla superior. Se repite eso de que modelos dentro de una misma marca no tallan igual, así que si te encuentras entre dos tallas, puedes tener algún problema de «comodidad».
Es un casco con un diseño muy redondeado y siguiendo las líneas maestras de otros productos de la marca, con lo que se sabe a primera vista que es un BELL. El almohadillado es correcto, quizás un tanto escaso en algunas zonas, y es desmontable para su limpieza. Cuenta con una visera regulable en altura, que nos permitirá levantarla para ver mejor en las bajadas.
Y aparte de todo esto, lo que le hace más especial… el hecho de contar con tres cierres similares a los que encontramos en las “botas de esquí”, perfectamente integrados en la forma del casco (pasando casi desapercibidos), que son los encargados de poder desmontar y montar en cuestión de segundos la mentonera.
¿Es el casco de Enduro definitivo?
Pero entonces… ¿tenemos el arma definitiva para todo? ¿XC, Enduro y Descenso todo en uno? Es lo que nos gustaría, pero evidentemente tenemos que deciros que no. ¿Tenemos entonces el mejor casco de Enduro de la historia? Mmmm, tampoco… pero si que tenemos un casco que nos aporta un plus de seguridad que seguramente muchos usuarios valoraran positivamente, además de la comodidad que ofrece el no tener que llevar dos cascos en la misma ruta (que se dice pronto), por lo que si no es el mejor, si es uno de los más polivalentes que podemos encontrar para practicar dicha disciplina.
Dicho esto veamos un poco como quedaría este casco con respecto a otros que ya conocemos y hemos podido probar, como son el ya veterano Specialized Deviant II y el Giro Xar. Ya os adelantamos que en algunos aspectos ganamos mucho y en otros perdemos bastante.
Comodidad y peso
Cuando hablamos del Giro XAR, hablamos de un casco muy cómodo para circular durante horas en nuestras rutas más largas, con buena ventilación y ligero. ¿Que nos ofrece además de esto el nuevo modelo de BELL? Pues más seguridad y protección.
Sin el mentón instalado, disfrutamos de un casco muy cómodo de llevar, y en el que apenas se nota su peso (unos 100 grs más), pero no solo eso, su forma en la parte trasera ya nos protege algo más la cabeza ante eventuales caídas y aún nos queda por añadir la parte delantera cuando nos enfrentemos con la primera bajada del día, que una vez puesta esta, vemos que el casco queda bastante cerrado en la parte frontal pero sin llegar a agobiar, muy en la línea de cascos integrales específicos como pueda ser el de Urge.
Las dos grandes tomas de ventilación situadas en el morro del Bell Super 2R, hacen que incluso de frente a nosotros se nos pueda ver la boca, si bien es verdad que si la siguiente subida está próxima y no quitamos el mentón, podremos subir con él, pero veremos como se forma condensación en el interior del mentón al respirar a poca velocidad.
Otra cosa que hemos notado, es que el ajuste del casco una vez puesto el mentón aprieta más la cabeza, haciéndolo un poco más incómodo de llevar en la subida.
Los cierres con la práctica van siendo cada vez más fáciles de poner y quitar, si bien parece que con el uso pueda que cojan algo de holgura, no parece que en ningún momento vaya a quedar bailando la pieza por falta de ajuste. También hemos comprobado que el ajuste de altura de la ruleta trasera que cierra el diámetro se acaba desplazando hacia el interior del casco.
Las ventajas que ofrece el Bell Super 2R frente a un casco de XC están claras, incluso frente a cascos con un aire más endurero… ¿pero qué sucede frente a un integral de toda la vida? Pues que parece un casco de juguete. Si has leído bien, si pensabas deshacerte de tu casco integral para ir a los Bike Park en favor de este, te recomendaría que no lo hagas.
Su estructura es mucho más ligera y liviana, pero también lo es su ajuste a la cabeza frente a un golpe fuerte, incluso la cantidad de material con el que está construido, lo que hace por norma general, tener un grosor de la mitad de centímetros en todas las zonas pasando de 4 centímetros que podemos encontrar en el Deviant II a tan solo dos en este caso. Y no sólo eso, la cantidad de almohadillado, desgraciadamente, también es bastante inferior.
Precisamente por esto recomiendo el uso de cascos integrales completos en los Bike Park, donde su construcción de una sola pieza siempre le dará mayor rigidez, y su almohadillado y espesor de construcción nos protegerá más ante una eventual caída. Tened en cuenta que en el BikePark se tienta mucho a la suerte, y tanto va el cántaro a la fuente, que al final…